Cómo abrir una cerradura de sobreponer sin llave
Cómo abrir una cerradura de sobreponer sin llave
Mientras estamos en la comodidad de nuestro hogar, aquel al que hemos convertido en un monumento del confort del día a día, no nos detenemos a pensar qué tan seguros estamos. Es algo que damos por sentado, por el simple hecho de contar con cerraduras en las puertas.
Por lo general, solemos acudir a cerraduras muy comunes, las de sobreponer, por ejemplo. Pero, si por cualquier motivo, deseas ingresar a casa con urgencia pero no tienes llaves, surge una común interrogante: ¿cómo abrir una cerradura de sobreponer sin llave?
No te mortifiques, en la vida casi todo tiene una solución. Y aquí te mostraremos trucos, técnicas o métodos para acceder a tu vivienda y luego, presumir con tus amigos.

¿Cómo son las cerraduras de sobreponer?
Las cerraduras de sobreponer son tan populares que no se concibe la idea de que no tengas una en alguna de las puertas de exteriores de tu hogar.
Se caracterizan por ser de hierro o metal fuerte, ideales para rejas o puertas hechas del mismo material; cuya finalidad sea la mayor resistencia. Es común ubicarlas en el exterior; ya sea en el jardín o puertas principales.
Su mecanismo interno no es variable con respecto a las demás cerraduras del mercado. Sin embargo, sí marca diferencia en cuanto a su instalación superficial y no de forma empotrada como es usual.
Otra de las cualidades que juega a favor de las cerraduras de superponer es, la dirección de apertura, cuya adaptación puede ser derecha o izquierda, según la necesidad del dueño. Además, los expertos afirman que la instalación es tan sencilla que puede hacerse en nivel principiante.
Todo esto es importante saberlo, porque el cómo funciona nos brindará muchas pistas de cómo abrir estas cerraduras si queremos ingresar al espacio que se encuentra cerrado.
Métodos para abrir una cerradura de sobreponer sin llave
Estas cerraduras, en su mayoría las antiguas, al ser de mecanismo interno similar a las demás, pueden ser forzadas con técnicas y trucos muy conocidos. Algunos de ellos se los vamos a describir con precisión para que puedas emplearlo con rapidez.
Llave bumping
Hazte con una de estas llaves maestras, que puede abrir casi cualquier cerradura que te propongas. Debido a esto, es un método que suelen usar los ladrones, o en caso totalmente diferente, los profesionales del servicio.
- El primer paso es insertar por la ranura central la llave bumping, con rapidez.
- Acto seguido, sácala, y repites el procedimiento un par de veces.
- En la última, la dejas dentro, si puedes girarla no hay problema, tal vez abra.
- Si no abrió, lo que sigue es golpear con presión pero, sin mucha fuerza, no querrás que la llave se parta dentro. Por lo general, con un solo golpe es necesario, sin embargo, en ocasiones se necesita hacerlo unas tres o cuatro veces.
Lo que queremos con esto es que la llave penetre hasta lo más profundo, una vez te asegures de que es así. Lo que queda es hacer el giro de la llave en el sentido de apertura, al tiempo que giras la manilla. Así se hace la magia y abrirá.

Lo que sucede allí dentro con la llave bumping es que al tener las sierras o dientes muy afilados y profundos, pueden encajar entre los pistones de seguridad y es cuando ejerce el desbloqueo, cuya ayuda adicional es la ejecución del golpe.
Kitt de ganzúas o herramientas hechas por ti
En algunos hogares, los propietarios suelen tener una serie de herramientas para forzar cerraduras, bien sea por experiencia previa o porque simplemente quieren prevenir. Te diremos cómo usarlas y cómo elaborar unas si no cuentas con ellas.
Necesitarás dos piezas, una ganzúa y una llave de tensión. Ambas vienen incluidas en el kit, que igual contiene variedad de herramientas que puedes ajustarse a la cerradura.
- Introduces, en primer lugar, la llave de tensión para que realice un tanteo rápido en el interior de la cerradura. Alójala en la parte superior de la ranura central.
- Es en este punto que introduces la herramienta ganzúa. La penetración en la cerradura debe ser minuciosa para que puedas verificar las posiciones de los pistones que mantienen el bloqueo.
- Cuando ya tengas al primero localizado, procede a realizar un movimiento hacia arriba que busque alzar el primer pistón, harás este procedimiento con los demás, lo normal es que sean de 5 a 6 pistones. Algunas cerraduras traen más o menos.
- Cuando ya hayas levantado todos los pistones, puedes mover la ganzúa para que haga de una llave, si visualizas bien, en este punto la ganzúa es la llave y solo abrirás como es acostumbrado y listo.
Para realizar las ganzúas ubica materiales caseros, pueden servir: clips, ganchos de cabello, cuchillo finito o alambres.
- Basta con cortar dos pedazos en partes iguales, estirarlos hasta que queden bien lisos. Con uno de los pedazos harás una llave de tensión con tan solo doblar una de las puntas, que quede como una L.
- Para la ganzúa, tomas el otro metal y haces una curva en uno de los extremos. Cerciórate de que quede como la curva de un gancho de ropa, será un soporte de mano.
La técnica a aplicar es la misma, no varía, a menos que necesites más práctica por la falta de costumbre con estas herramientas. De todas maneras funcionará.
Fuerza letal
La idea no es llegar a este punto, pero es probable que no tengas más opción. Si lo has intentado todo y nada te funciona, tendrás que hallar una sierra, sus resultados son muy rápidos.
Con la sierra eléctrica puedes desmontar la cerradura por completo hasta que logres ingresar a la casa. No encontrarás problemas al hacerlo o intentarlo porque la naturaleza de la estructura de una cerradura de sobreponer es débil.
Usa guantes y lentes protectores, es seguro de que saltaran fragmentos de metal a cualquier dirección. Solo enfócate y mantén la concentración.
No olvides dar aviso a los vecinos, los ruidos los alertará y podrían llamar a la policía.
