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Cómo abrir una puerta de madera con una tarjeta
Las puertas de madera son las que se usan en habitaciones y baños. Y por su uso constante, suelen ser las que más se traban o se cierran accidentalmente.
Por eso, si te has preguntado cómo abrir una puerta de madera, aquí te daremos unas alternativas de cómo hacerlo. Y aunque lo dudes, estas pueden ser las más fáciles de abrir, pero si no tienes experiencia en el arte de la cerrajería y el forcé de cerrojos, la tarea puede parecer un completo desafío.
De manera que es necesario contar con ciertos conocimientos para solucionar y, en este caso, una tarjeta puede ser la llave maestra. Además, el 80% de las personas recurren a ella para solucionar este tipo de imprevistos, precisamente por su sencillo procedimiento y su eficacia.
Entonces, si tienes un percance de este tipo, y quieres saber cómo abrir una puerta de madera con una tarjeta, solo sigue nuestros pasos:

1. Elige la tarjeta
Para realizar nuestro trabajo es necesario elegir nuestra herramienta a utilizar. Podemos contar con una tarjeta de cualquier tipo, lo importante es que sea de plástico, ya que este material permite flexibilidad y resistencia. Justo lo que se necesita para el proceso que se debe realizar.
Así que:
- Ubica una tarjeta de plástico. Puede ser de crédito, de débito, de regalo, de afiliación o cualquier otra que ya haya caducado o que no pienses usar jamás.
- Si no cuentas con una, puedes elaborarla con un pedazo de plástico como una radiografía, botella de gaseosa, etc.
- El tamaño de la tarjeta que vayas a realizar con el plástico, debe ser considerable, que puedas manipularlo durante el proceso.

2. ¿Dónde colocar la tarjeta?
Cuando ya tengas la tarjeta a mano con la que trabajarás, debes ubicar el lugar donde colocarla, para dar inicio al forcé.
De manera que:
- Debes insertar la tarjeta en el espacio existente entre la puerta y el marco que la rodea.
- La altura de la inserción de la tarjeta, debe ser de unos pocos centímetros por encima de la cerradura, entre 6 o 10 aproximadamente.
- Empuja la puerta hacia atrás todo lo posible con la mano que no tienes ocupada, para hacer un poco de espacio e insertar la tarjeta.
3. Deslizamiento de la tarjeta
El objetivo de esta técnica es hacer contacto con el resbalón, hundirlo por completo hacia la cerradura para poder desactivar el cierre y abrir nuestra puerta. Para ello, debes realizar movimientos o más bien deslizamientos con la tarjeta, al ser introducida entre la puerta y el marco.
El resbalón, conocido también como pestillo, es la pieza de metal que sobresale de la puerta y se incrusta en el orificio que contiene la placa; ubicada en el marco. Este sale de la cerradura y entra en el cerradero para cerrar la puerta.
- Ubicada la tarjeta en la posición indicada, iniciamos su desplazamiento hacia abajo.
- Cuando el movimiento de la tarjeta se detenga por el tropiezo con el pestillo, aplicamos mayor presión en ella.
4. Proceso de movimiento
Debemos mover el resbalón de la cerradura, el cual es el que mantiene la puerta cerrada. Los movimientos que realizaremos deben ser para movilizarlo hacia el Interior del mecanismo, retirándolo del cerradero.
- Realiza movimientos de adelante hacia atrás, tratando de que la tarjeta se monte por encima del resbalón.
- Cuando sientas que la tarjeta está ganando espacio entre el pestillo y el marco de la puerta, aplica más presión.
- Debes hacer palanca contraria al resbalón, hasta que este le deje el camino libre a la tarjeta.
5. Apertura de la puerta
Llegado a este punto, ya se ha completado una buena parte del trabajo, solo queda ayudarnos con nuestro cuerpo, realizando un pequeño empuje y girando el pomo para darle apertura a la puerta.
Para ser más claros con eso, realiza lo siguiente:
- Cuando ya tengas la tarjeta entre el resbalón y el marco. Quiere decir que el resbalón estará hundido por completo hacia la cerradura.
- De no estar hundido, debes realizar nuevamente un movimiento de palanca doblando la parte que sobresale de la tarjeta hacia el marco, de manera que entre el resbalón.
- Luego con el cuerpo, empujas la puerta y giras el pomo.
- La puerta abrirá.
Es importante entender que este trabajo puede no ser tan sencillo. Algunas puertas de madera requieren de mucho esfuerzo, mientras que otras se pueden abrir solo con introducir una tarjeta entre el marco y el pestillo, sin necesidad de inclinarla o doblarla tanto.
Consideraciones
- Las puertas de maderas suelen tener cerraduras de pomo, lo que hace más sencillo este tipo de técnica.
- Una tarjeta plástica no genera daños a nuestras puertas ni a la cerradura misma, ya que solo ataca al resbalón y desactiva el cierre.
- Es importante señalar, que esta técnica solo aplica para puertas que no estén aseguradas con llave, ya que, de lo contrario, no serviría de nada mover el resbalón, además de lo difícil que sería porque no cedería. No obstante, si la puerta es de pomo simple y tiene seguro, si se puede desactivar si se realizan los pasos adecuadamente.
Ventajas de abrir una puerta de madera con una tarjeta:
- Es segura y confiable, no solo por su sencilla y fácil aplicación, sino porque no genera daños físicos ni daños a la puerta.
- Se puede utilizar cualquier tarjeta plástica.
- Es una técnica sencilla de aplicar.
- No se necesita conocimiento especializado para su aplicación.
Desventajas de abrir una puerta de madera con una tarjeta:
- No funciona si la puerta contiene seguro de llaves.
- No siempre abre en el primer intento. Debes tener coordinación del deslizamiento, movimientos y empuje.
- Debes tener conocimiento de donde dejas tus llaves y evitar perderlas, ya que el constante forcé a la cerradura pudiera traerte problemas con su funcionamiento.
Podemos hacer uso de esta técnica sin necesidad de llamar a un cerrajero ni gastar dinero. Es una manera rápida y sencilla de solucionar un problema muy típico en todas las casas. Tan solo necesitas un poco de tiempo y dedicación. Verás como el resultado es idéntico al realizado por un profesional.