Cuáles son las partes de un cerrojo
Cuáles son las partes de un cerrojo
Muchas veces, la forma más sencilla de comenzar un proyecto es teniendo el conocimiento de lo que se hará y cómo se procederá. Si constantemente estás realizando trabajos de cerrajería, te puede resultar sumamente beneficioso conocer cuáles son las partes de un cerrojo.
En muchos casos como el mantenimiento, reparación o cambio de cerraduras; se hablan sobre piezas específicas y, es necesario saber a qué se están refiriendo para evitar cometer errores o perder tiempo investigando.
Por ello, te enseñaremos de forma resumida y fácil los elementos principales de una cerradura; así como sus funciones básicas. De esta manera sabrás reconocer cada pieza de una manera sencilla y didáctica.

Cerraduras: Modelos, tipos y características
Antes de explicarte cuáles son las partes de una cerradura, es indispensable que sepas que en el mundo de la cerrajería existe una enorme variedad de modelos de cerraduras que van desde los distintos precios, marcas, tamaños y formas. Aunque, si bien existe una amplia variedad, podemos englobarlas en dos tipos: las cerraduras embutidas y las cerraduras de sobreponer.
Las cerraduras embutidas son las más utilizadas por la población, debido al buen nivel de calidad y seguridad que son capaces de proporcionar. Dentro de sus características más destacables tenemos que, se instalan desde el interior de la puerta, por lo que quedan invisibles a simple vista. Además, disponen de un alto grado de seguridad; lo que nos garantiza protección ante cualquier potencial problema.
Este modelo de cerradura es verdaderamente cómodo y fácil de instalar. Además presenta una estética significativa buena, debido a que queda invisible al ojo; por lo que no entorpecerá con el diseño de la puerta. Tan solo podremos observar el área en la que se ingresa la llave y la manija.
Por otro lado, las cerraduras sobrepuestas son las que se colocan sobre la puerta; es decir, quedan completamente visibles y ninguna de sus partes necesita ingresar en la puerta. Esta cualidad las hace sencillas de instalar, debido a su transversalidad.

Al contrario de las cerraduras embutidas, el modelo sobrepuesto no es muy estético; debido a que podremos ver fácilmente la cerradura cuadrada sobre la puerta. Además, su nivel de seguridad es menor al modelo anterior; aunque también dependerá en gran medida del tipo de cerradura que se posea.
Este modelo puede emplearse perfectamente, como cerradura complementaria en lugares con sistemas de apertura asegurado. Adicionalmente, poseen un gran nivel de versatilidad; ya que pueden ser instaladas en cualquier puerta sin importar el modelo.
Por último, es preciso destacar que un cerrojo y cerradura sobrepuesta no son lo mismo; solo cumplen un fin común. Esto se debe a que, las cerraduras disponen de elementos en los que podemos ingresar nuestras llaves para hacerlas girar, bien sea para abrir o cerrar. Mientras que, los cerrojos tienen una cadena barra travesera que bloquea la puerta.
Sin importar el modelo que finalmente sea instalado, ambos están diseñados con el objetivo de hacer que las puertas permanezcan cerradas y que sea lo más sencillo posible para el propietario ingresar en la propiedad.
Anatomía de una cerradura: Partes de un cerrojo
Debido a que existen muchos modelos de cerraduras, algunas dispondrán de piezas que otras no tendrán. Aunque en general, la mayoría cuenta con los siguientes elementos:
Pomo o manija
Esta pieza visible, generalmente alargada o redonda; nos permite interactuar directamente con la cerradura. Esto se debe a que cuando giramos el pomo, si la llave no está pasada, la puerta se abrirá sin ningún impedimento.
Bocallave u ojo de cerradura
Es el área en la cual ingresamos la llave. Dependiendo del modelo puede variar su ubicación, aunque habitualmente se encuentra cerca de la manija o incluso dentro del pomo.
Frontal
Esta pieza es la placa metálica que podemos encontrar en la parte lateral de la puerta, por donde sale el resbalón. Forma parte del sistema de apertura y en la mayoría de los casos, va sujeto con tornillos. Cumple múltiples funciones, ya que cubre el bombín y evita que la cerradura quede sujeta.
Resbalón
Si nos ubicamos en el lateral de la puerta, podremos ver una pieza entrar y salir cuando manipulamos el pomo o hacemos girar el cilindro de la llave; ese es el resbalón. También denominado como lengüeta de la cerradura, es la pieza que impide abrir la puerta cuando la llave está girada. Para retraerlo y abrir finalmente la puerta, tendremos que mover la manija hacia la dirección de apertura.
Bulones
También llamados paletones, son las piezas que permiten a la puerta abrir o mantenerse bloqueada. Lo que quiere decir que, son los elementos que cuando giramos la llave salen y se introducen en la cavidad ubicada en el marco de la puerta; por lo que cuando giramos la llave en el sentido de apertura, se retrae en el interior de la cerradura para que esta abra sin problemas.
Esta es una de las piezas más importantes de una cerradura; ya que es la encargada de brindarnos seguridad y privacidad al momento de pasar la llave. Adicionalmente, este elemento es perfectamente reemplazable; por lo que si llegase a presentar un problema, tan solo tendríamos que cambiarlo sin necesidad de modificar toda la estructura.
Cerradero
Es una placa metálica ubicada y sujeta en la cerradura; en ella se encuentra ubicado el resbalón y los bulones.
Llaves: Tipos y características
Además de las partes de una cerradura o los diversos modelos de las mismas, deseamos presentarte los diferentes tipos de llaves que es posible encontrar en el mercado. De esta manera ante cualquier eventualidad, sabrás reconocerlas y trabajar con mayor eficiencia:
Llaves clásicas
Actualmente, este tipo de llaves ya no son utilizadas por lo poco prácticas, pesadas y grandes que podían llegar a ser. Aun así, todavía podemos encontrar lugares donde las siguen utilizando como en casas antiguas, castillos, monasterios o incluso para abrir baúles.
Llaves de serreta
Son las más utilizadas en el mundo y seguramente, será el modelo que utilices en casa. Cada llave cuenta con un dentado específico que corresponde a la configuración del cilindro en la cual entra; por lo que es poco común encontrar dos modelos iguales en un área geográfica pequeña. Adicionalmente, suelen ser las llaves utilizadas para abrir candados, lockers o similares.
Llaves de pompa
Estos tipos de llaves poseen dientes en sus dos caras, por lo que esta es su característica más distintiva. Suelen ser utilizadas con mayor frecuente en cerraduras de alta seguridad como las que poseen elementos anti-bumping, anti-ganzúas, anti-extracción, entre otras. Aunque también, pueden encontrarse en cerramientos blindados.
Llaves de paleta
También conocidas como paletón, están conformadas por una espiga o barra central y un diente lateral. Estas suelen ser utilizadas frecuentemente en puertas acorazadas o en cerraduras con gorjas. Además, el cilindro en el cual ingresan suele estar oculto a la vista; por lo que son realmente seguras.
Llaves cruciformes
Estas llaves poseen una forma un tanto peculiar, siendo similar a una cruz y a una espiral a la vez. Están compuestos por una espiga central con un determinado nivel de largo y con dientes que pueden variar en función de la cerradura.
El mundo de la cerrajería es enorme y hermoso, sigue investigando y ampliando tus conocimientos de esta profesión llena de sorpresas. Si deseas ampliar aún más tus conocimientos, no dudes en visitar nuestro artículo sobre las partes de un candado.
